Vista previa del material en texto
Resumen - Electrodiagnóstico en las Enfermedades Neuromusculares Los estudios de electrodiagnóstico constituyen una extensión del análisis clínico del paciente con sospecha de enfermedad neuromuscular. Dependiendo del examen realizado, se puede evaluar el sistema nervioso central y/o periférico. Son empleados para estudiar síntomas y signos como: disestesias, parestesias, debilidad, atrofia muscular, alteraciones en la marcha, fatigabilidad, etc. Proveen información al clínico para: 1. Localizar anatomicamente las lesiones del sistema nervioso central o periférico 2. Definir el tipo de anormalidad (por ejemplo axonalo desmielinizante) 3. Determinar la distribución de la anormalidad, focal (sindrome de túnel carpo) o generalizada (polineuropatía, miopatía) 4. Estimar el tiempo de evolución de la lesión 5. Determinar la progresión o recuperación de la lesión (establecer pronóstico) 6. Ayudar a escoger la opción terapéutica mas apropiada 7. Localizar el lugar para la correcta infiltración de toxina botulínica Para estudiar el asta anterior de la medula, las raíces, plexos, nervio periférico, unión neuromuscular y la fibra muscular, empleamos la electromiografía, la neuroconducción, el reflejo H, la onda F y el test de estímulo repetitivo. Así mismo, los potenciales evocados (visuales, auditivos, motores y somatosensoriales), se realizan para estudiar principalmente el sistema nervioso central (médula espinal, tallo cerebral y encéfalo). No se puede olvidar que los estudios de electrodiagnóstico, a diferencia de algunos imagenológicos (RX, RMN, TAC), son exámenes dinámicos, que requieren la presencia del médico especialista en medicina física y rehabilitación (Fisiatra) durante el desarrollo del estudio, para poder entrevistar y examinar al paciente, analizar en tiempo real los resultados que se obtienen, y así poder tomar decisiones que permitan una aproximación diagnostica mas correcta. Idealmente los estudios deben ser comparativos y al menos realizar neuroconducción y electromiografía, ya que son estudios complementarios y la practica de uno solo de ellos sin duda conllevará a que el examen quede incompleto. A manera de ejemplo, a un paciente con sospecha de síndrome de túnel del carpo se le debe ordenar electromiografía y neuroconducción de ambos miembros superiores. Por otro lado, para el estudio de patologías sistémicas, como una polineuropatía, debemos explorar las cuatro extremidades con electromiografía y neuroconducción, y en otras entidades como las radiculopatías, plexopatías, miopatías o la esclerosis lateral amiotròfica (ELA), se debe solicitar además de lo anterior, el estudio de los músculos paraespinales. Resumen de los protocolos de electrodiagnóstico en el estudio de las patologías neuromusculares más comunes Electromiografía Código 930860 Neuroconducción Código 891509 Reflejo H Código 891502 Onda F Código 891502 Test de estímulo repetitivo Código 891511 Observaciones Síndrome de túnel del carpo ✓ (2) ✓ (8) Explorar 2 extremidades Neuropatía de cubital en codo ✓ (2) ✓ (8) Explorar 2 extremidades Radiculopatía lumbosacra ✓ (2) ✓ (8) ✓(2) Explorar paraespinales y 2 extremidades Radiculopatía cervical ✓ (2) ✓ (8) Explorar paraespinales y 2 extremidades Polineuropatías ✓ (4) ✓ (12) ✓ (4) Explorar 4 extremidades Enfermedad de unión neuromuscular ✓ (2) ✓ (8) ✓ (2) EMG de fibra única Miopatias ✓ (4) ✓ (12) ✓✓ (2) Explorar paraespinales y 4 extremidades Enfermedades de la motoneurona (ELA) ✓ (4) ✓ (12) ✓✓ (2) Explorar paraespinales y 4 extremidades Plexopatía braquial ✓ (2) ✓ (12) ✓ (2) Explorar paraespinales y 2 extremidades Plexopatía lumbosacra ✓ (2) ✓ (12) ✓ (2) Explorar paraespinales y 2 extremidades ✓ Necesario ✓✓ Opcional Jorge Arturo Díaz Ruíz, MD Profesor Titular- Universidad Nacional de Colombia Resumen - Electrodiagnóstico en las Enfermedades Neuromusculares Resumen de los protocolos de electrodiagnóstico en el estudio de las patologías neuromusculares más comunes